7 de mayo de 2011

ROBOTS A COMPETICIÓN

Unos 120 alumnos mostraron sus proyectos en un encuentro celebrado en Málaga, organizado por el IES. Politécnico Jesús Marín.


Faltan diez minutos para que comience el combate. Afloran los nervios. Algún que otro concursante sufre una avería de última hora, pero hay que subir al tatami. Comienza el minisumo, la prueba preferida del público asistente a la III edición de las Jornadas malagueñas de Robótica, Malakabot 2011, organizadas por el IES Politécnico Jesús Marín y que este año ha reunido a unos 120 estudiantes con más de un centenar de robots en la Delegación de Educación.

Antes de comenzar las pruebas, los jóvenes ultiman en boxes los detalles de sus proyectos. Rastreadores, velocistas, minisumos y expertos en laberintos ensayan antes de comenzar la competición. Los robots de la prueba libre son los que más llaman la atención. Hexápodos, casas que se manejan mediante internet, un cuadrúpedo que anda por paredes metálicas son algunos de los proyectos llegados desde Segovia, Guadalajara, Granada, Ciudad Real, Algeciras, Madrid, además de los colegios de la capital, el IES San José y el Politécnico Jesús Marín y el CEIP Río Verde de Marbella.

La media de dedicación para crear estos robots autónomos es de entre cuatro y cinco meses, aunque hay algunos a los que se les ha echado el tiempo encima. Daniel Gómez elaboró su hexápodo en dos meses junto a su compañero Óscar Ramírez, ambos estudiantes del módulo de grado superior de Desarrollo de Productos Electrónicos del IES Juan de la Cierva de Madrid. Entre las características de su proyecto destacan los sensores de ultrasonido que permite al robot esquivar obstáculos.

Sorprendente es el trabajo de tres estudiantes de cuarto de la ESO del IES Politécnico Jesús Marín. El pasado febrero se alzaron con el premio al mejor robot de la First Lego Leage Málaga, celebrado en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA). Tan solo necesitaron tres horas para instalarle a aquel proyecto varias innovaciones y presentarlo ayer en la categoría libre de Lego del Malakabot 2011. "Le hemos incluido sensores de luz, de ultrasonido y de voz. La verdad es que hemos estado investigando durante bastante tiempo, aunque fue anoche [por la noche del miércoles] cuando lo montamos", reconoce Jesús López, uno de los tres jóvenes.

La diversión de estos amantes de la robótica llegó con la prueba de los minisumos. Dieciséis robots lucharon por parejas sobre un tatami. El objetivo: expulsar o volcar al contrincante. Malakabot 2011 alcanzó en su tercera edición un récord histórico de participación.



Fuente: www.malagahoy.es

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